María Eugenia Vidal justificó este pequeño porcentaje para llegar a un incremento de 10% en lo que va del año, como la suma que le gana a la inflación: de ahí se desprende lo que viene reconociendo el Gobierno de alguna u otra manera, el fin de la mentira del 15%. Con estos 330 pesos aproximadamente, los educadores recibirán en total un 10%, sin tener la paritaria cerrada, luego de que en abril recibieran 5% y en mayo 3%.

La gobernadora tira agua para su molino en la disputa que mantiene contra los docentes bonaerenses y anunció un nuevo adelanto del 2%, a cuenta de la paritaria salarial que insiste en negociar en base a un porcentaje ya caduco incluso desde las declaraciones de distintos funcionarios, en relación a la inflación proyectada para 2018.

“Seguimos sin tener paritarias acordadas con los docentes en Buenos Aires, pero les dimos un aumento a cuenta de la paritaria y con los números de hoy decidimos liquidar un 2 por ciento adicional para garantizarles que siguen arriba de la inflación”, sostuvo Vidal.

Según los datos oficiales del Ministerio de Educación que relevó chequeado.com, la remuneración bruta de un maestro bonaerense de grado con diez años de antigüedad por una jornada simple de cuatro horas de clase -valor representativo para más de la mitad del total- es de $16.518 a diciembre de 2017. 

Vidal además aplicó la cláusula que los gremios docentes vienen rechazando de plano, incluso reconociendo en sus palabras la amenaza que significa esta política: “Aquellos que hayan cumplido van a cobrar mil pesos más en junio que se va a liquidar ahora”, lanzó su provocación.