Durante el Mundial de Brasil los medios hegemónicos del país y del mundo se esforzaron por mostrar un país caótico y a una Presidente, Dilma Rousseff, en jaque.

Sin embargo, en esta Copa América no sucede lo mismo con Chile y Bachelet, una Presidenta con muy baja imagen, apenas 1 de 4 chilenos la apoya.

Su Gobierno atraviesa desde el verano una crisis que se profundizó cuando ella misma le pidió la renuncia a todo su gabinete. Y que estalló hace casi un mes con el asesinato de dos estudiantes en Valparaíso.

Hace un mes que el gremio más poderoso de la educación está de paro y los medios... nada. Mirá el informe de 678.