Pablo Esparza cuenta que apenas llegó a la redacción de la BBC Mundo, tuvo que aterrizar en Londres,donde en la redacción de BBC Mundo hay argentinos, colombianos, mexicanos, etc. 

"El castellano llevaba casi 30 años siendo mi lengua materna. La hablaba y la escribía a diario, pero de una forma limitada, como hacemos todos cuando tomamos nuestro entorno inmediato como única referencia. En Londres, en ese rincón de América Latina en la capital británica que es la redacción de BBC Mundo, me topé de frente con la amplitud y diversidad del español", comienza relatando. 

"Sabía que el castellano que debía utilizar en el trabajo era el "estándar latinoamericano" porque nuestra audiencia es fundamentalmente de ese origen y porque así lo estipulaba el contrato que firmé.'Algo fácil, siempre y cuando se sigan unas reglas sencillas'" , pensó Esparza. 

Una de las cosas que se dio cuenta a la hora de querer modificar y entender la manera en que se escribe y de qué forma se expresan todos con un mismo idioma pero que tiene miles de significados y miles de palabras nuevas que se van creando en cada cultura de cada país de latinoamérica, lo primero que tuvo que hacer es "dejarse el pretérito perfecto compuesto en casa y desterrar el vosotros y sustituirlo por el ustedes" 

Y da un ejemplo: Pasar del "he llegado a la BBC y os he encontrado a todos vosotros" al "llegué a la BBC y los encontré a todos ustedes".

Por esta razón, Pablo Esparza realiza la elección de 6 palabras que le parecieron de las más interesantes e hizo un breve resumen de lo que significan. 

-Quilombo: para mí una palabra hermosa, por su significado y por su origen africano relativamente poco común en el castellano, que el español de España debería incorporar a su uso cotidiano lo antes posible. "Quilombo" deriva de las lenguas que hablaban los esclavos llevados por los españoles desde África a América. En portugués de Brasil se refiere al lugar donde se escondían los esclavos huidos. El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española cita en primer lugar su acepción como prostíbulo. Yo la aprendí como sinónimo de escándalo, lío, desorden, barullo o algarabía, otra palabra hermosa.

-Al tiro: para hacer algo "in-me-dia-ta-men-te" o "en-un-san-tia-mén" no hace falta perder el tiempo pronunciando tantas sílabas. "Al tiro" es concisa, directa y no deja dudas de que hay prisa y de que alguna relación tienes con Chile. Si la pronuncias en España lo más seguro es que te entiendan al verte con cara urgencia, pero si quieres evitar malentendidos y asociaciones con armas de fuego, mejor recurrir a los clásicos "en un periquete", "en menos que canta un gallo" o "en un pis pas". O a expresiones más castizas como "cagando leches" y similares.

-Jurgo: esta palabra la aprendí de una inglesa que habla español como una colombiana. Denota abundancia, gran cantidad de algo: "un jurgo de gente". Y se podría "traducir" como "montón", "mucho", "gran cantidad" y "un huevo" de expresiones más.

 muchedumbre, gentío. O, simplemente, un jurgo de gente.

-Qué tan…: en España, las palabras "que" y "tan" rara vez van juntas, y menos para expresar el significado con que se usan en América Latina. Si ustedes preguntan en España "qué tan lejos está una ciudad", lo más seguro es que les entiendan, pero que les miren extrañados. Su interlocutor estará seguramente más acostumbrado a que le digan "lo lejos que está esa ciudad" o le pregunten "cuán lejos está" o "a qué distancia". Sin embargo, el "qué tan", que tan mal nos suena en un principio, es a mi juicio una de las expresiones más fácilmente adoptables.

-Tener cola de paja: me atrevo a decir que este dicho dejaría perplejos a muchos españoles que no tengan un conocimiento del habla latinoamericana. Se usa cuando alguien sabe que ha obrado mal, tiene mala conciencia y trata de evitar una situación incómoda que lo descubra ante los demás. Me gusta por su precisión al definir un sentimiento y porque es gráfica al tiempo que sutil. Gráfica porque si uno tiene cola de paja y se acerca al fuego corre el riesgo de que se le prenda. Sutil porque no hace falta mencionar el fuego en la expresión para entenderlo…

-Vaina: si el español se tuviera que reducir a una sola palabra sería esta. "Vaina" tiene la virtud -y el gran defecto- de hacer el resto del idioma superfluo y prescindible. Con solo este sustantivo y el verbo adecuado se puede expresar todo: "dame esa vaina", "haz esta vaina", "ando en una vaina"… En cambio, en España, casi siempre, una vaina es una funda o, en algunas regiones, una judía verde. Para otras vainas usamos palabras más aburridas, como "cosa" o, simplemente, "algo".

-Buena onda: ya sé que dije 5 expresiones. Pero esta va de regalo. Este modismo se entiende en España, pero pocos lo usan y, quienes lo hacen, dejan entrever que alguna relación tienen o tuvieron con América Latina. ¿Y qué mejor forma de acabar con "buen rollo"?