El informe destacó que si bien el progreso de toda la región se lentificó desde 2010- debido a la caída en el crecimiento económico y de los precios de los bienes exportables-  hubo países donde la clase media creció más que en otros como en el caso de Argentina (un total de 17,5 %).

La Argentina lideró ese crecimiento, pasando de una clase media que alcanzaba al 15% de la población total en 2001, a una que en 2011 contuvo al 32,5%, lo cual significó un crecimiento de 117% en diez años.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya había dado cuenta que el 54,5% de los hogares argentinos son de clase media, y Argentina se ubica segundo en el ranking regional después de Uruguay con el 55,8% de sus hogares.

Mientras que el Banco Mundial aseguró que “desde su crisis económica de 2002, Argentina ha sido uno de los países con mejor performance en América Latina y el Caribe en reducción de la pobreza y en compartir las ganancias de la creciente prosperidad expandiendo la clase media”.

Respecto a datos de 2011, Argentina cuenta con un 32,5% de su población dentro de la clase media, Chile con un 33,8% y Uruguay con un 32.8%. Argentina superó el ritmo de expansión general de América del Sur en 6,5 puntos porcentuales, y a su vez el tamaño de su clase media pasó a ser 5,5 puntos porcentuales mayor el promedio de la región.

Pew señaló que “si bien el crecimiento económico es el factor más importante en reducir la pobreza y elevar a las personas en la clase media, las políticas de redistribución del ingreso y la disminución de la desigualdad también ayudaron a expandir la población de clase media”. Uno de los programas que fueron destacados por este instituto norteamericano fue la Asignación Universal por Hijo cuyo proyecto de movilidad ya es ley.