La Policía Bonaerense perseguía a un automóvil con dos delincuentes que se dirigía por la calle Zapiola, en la localidad de Bernal, partido de Quilmes.

Pero, al llegar a la altura del arroyo Las Piedras, la camioneta perdió el control y terminó en el agua, como si se tratara de una película cómica.

Los policías tuvieron que ser asistidos por otros efectivos, mientras que los delincuentes lograron escapar, según consignó Minuto Uno.

"Un oficial resultó golpeado y el otro con hipotermia", contó un vecino del barrio en declaraciones televisivas.

Esta persecución policial en Bernal terminó de la manera menos esperada