Crimen de Anahí: un misterioso testigo podría dar un giro en la investigación
Un hombre fue a hablar de forma espontánea con la mamá de la joven y luego ratificó sus dichos ante la Justicia.
Silvia Pérez abrió la puerta y un misterioso hombre le dijo que tenía algo importante que contarle. La madre de Anahí Benítez lo escuchó con atención: "Tengo miedo por mi familia. Ellos no querían que hablara pero me mando solo, sin que nadie sepa".
Lo que este nuevo personaje contó podría responder las dudas sobre lo que sucedió con Anahí aquel 29 de julio de 2017, cuando a las 17.30 salió de su casa con destino al Parque de Lomas a donde nunca llegó.
Para los investigadores, Anahí estuvo secuestrada en la casa del detenido Marcos Bazán (34), en Santa Catalina, donde -según la causa- la mantuvieron cautiva, la drogaron y abusaron de ella. La casa de este hombre está a poco más de dos cuadras del terreno donde hallaron los restos de la joven, en la reserva ecológica de Santa Catalina.
Además de Bazán también fue detenido Marcelo Villalba, quien violó a Anahí y le regaló a su hijo el teléfono celular de la joven.
Lo cierto es que pese a las detenciones aún quedan interrogantes por responder, como si la joven estuvo todo el tiempo en la casa de Bazán, o cual es el nexo entre éste hombre y Villalba. El testimonio de este nuevo personaje -que ratificó sus dichos ante la fiscal Fabiola Juanatey- podrían aclarar estas cuestioes.
El testigo reveló que Anahí fue drogada y violada por cinco hombres -uno de ellos sería Villalba- en una propiedad ubicada a siete cuadras de la casa de la víctima. Luego, pensando que "se les había pasado de droga", la llevaron a Santa Catalina para "descartar el cuerpo en una zona despoblada". Allí descubrieron que la chica aún estaba viva y decidieron llevarla a la casa de Bazán.
El nuevo testigo también habló sobre "una chica de la calle" que habría entablado un vínculo con Anahí y sería quien "la llevó hasta la propiedad” donde la drogaron y la violaron.
Tras sus declaraciones se hicieron tres allanamientos: en la casa donde habría estado la víctima antes de ser trasladada a Santa Catalina y en los domicilios de otros dos sospechosos, uno de ellos pariente de Villalba. Allí se levantaron rastros que serán peritados.
El nuevo personaje contó que obtuvo esta información porque un familiar suyo, adicto a las drogas, consumió con las personas que estuvieron con Villalba el sábado que desapareció la víctima. Ellos habrían contado lo sucedido.
Los acusados
Marcos Bazan y Marcelo Villalba:
