La Justicia de Gualguaychú condenó este martes a la joven Nahir Galarza a prisión perpetua por el crimen de su novio Fernando Pastorizzo, ocurrido en diciembre pasado en esa ciudad del sur entrerriano.

La joven de 19 años fue considerada por "unanimidad" como culpable de "homicidio agravado por el vínculo de pareja" con la víctima.

La defensa de Galarza había requerido una condena con un máximo de cinco años de prisión por "homicidio culposo", bajo el argumento de que se había tratado de un hecho accidental que se produjo en un contexto de violencia de género del que supuestamente la chica era víctima.

Nahir Galarza, en su declaración, dijo que se le nubló la mente en el momento en el que realizó en forma "accidental" los dos disparos con los que mató a su novio de 20 años.

En cambio, los fiscales Sergio Rondoni Caffa y Lisandro Beherán sostuvieron que Nahir realizó los disparos en forma voluntaria y que sabía manejar el arma porque le había enseñado su padre policía.

El crimen de Fernando Pastorizzo, de 20 años, ocurrió el 29 de diciembre de 2017  y Galarza, que primeramente dio su versión de los hechos, confesó horas más tarde haber sido la autora de los disparos.