Las pruebas sobre la tergiversación de los hechos represivos en la comunidad mapuche de Cushamen, en Chubut, que pronunció la ministra en ocasión de dar explicaciones en la comisión de Seguridad Interior ya son noticia vieja y sirvieron para dejar en claro que la funcionaria prioriza cuidar a sus hombres de Gendarmería que a la ciudadanía.

Sin embargo, de ahí a hacerlo tan explícito el trecho se hizo realmente corto. Tal vez fue la hospitalidad del canal amigo o lo que parece un humor 'etílico' lo que abrió la puerta a semejante confesión. Piedra libre, ya todos nos dimos cuenta. Pero siguen sin responder ¿dónde está Santiago Maldonado?