Hay disfraces que pueden ayudar a los que no quieren respetar el aislamiento obligatorio. Ponerse un delantal y fingir ser médico es una actitud miserable en estos tiempos,ero puede ser efectiva.

Pero subirse a una moto disfrazado de Barney es la forma menos aconsejable para el que quiere circular por las calles.

Por eso no se entiende que pensó este hombre que terminó, como era de esperar, en una comisaría por no cumplir con la cuarentena.