Daniel Parisini, más conocido en las redes como El Gordo Dan, es un hombre que dice ser médico, o camillero o depende de quién le pregunte pero lo cierto es que, al menos desde que Milei llegó al poder, “trabaja” como el brazo armado de los libertarios, creyendo que no tiene que rendirle cuentas a nadie.

A modo de broma el impresentable Gordo Dan empezó a pedirle a Milei que meta presos a algunos periodistas, como si el mandatario tuviera esa potestad, pero las amenazas superaron al chiste y muchos periodistas se sintieron perseguidos por estas metodologías cuasi nazis.

Incluso Nicolás Wiñazki, al que nadie puede acusar de estar en contra del Gobierno, salió a defender al periodismo de estos impresentables e innecesarios ataques por parte de lo trolls del Gobierno y desde el mismo Presidente, quien habría pedido la cabeza de al menos dos comunicadores de A24.