Todo comenzó cuando Graciela Ocaña eligió hacer oídos sordos al pedido de que hable sobre la causa de los aportantes truchos en su campaña para diputada Nacional por Cambiemos junto a María Eugenia Vidal. Esta vez la "hormiguita" publicó una imagen donde invitaba a sus seguidores a ir a una marcha a pedir el desafuero de Cristina Fernández de Kirchner y por "la caducidad de dominio" y Aníbal Fernández recogió el guante. 

El exjefe de Ministros de la expresidenta trató de burra a la exministra de Salud por hablar de "caducidad de dominio" en vez de "extinción de dominio", un proyecto presentado por Cambiemos para que los bienes conseguidos de manera ilícita y que el Estado se haga de él.