En un artículo publicado por el periodista Nicolás Lovaisa se destaca que Silvani formó parte del organismo de inteligencia más importante de la dictadura.

Desde principios de la década del ´70 Silvani está relacionado con la familia Del Sel ya que mantiene una fuerte amistad con su cuñado, Miguel Torres del Sel, que lo llevó a formar parte de los equipos del candidato a gobernador del Pro.

Juan Agustín Torres del Sel y Silvani se conocieron en la Escuela de las Américas en Panamá. Una vez egresados Silvani ingresó al Batallón de Inteligencia 601, un organismo clave en la represión ilegal.

Recaló en Tucumán, a mediados de la década del ´70, para desempeñarse en el Regimiento de Infantería 19.

Silvani entró en contacto con Miguel Del Sel en reiteradas oportunidades comerciales y actualmente es uno de los hombres de consulta en materia de seguridad del candidato del Pro.

Lovaisa escribe: "Hay un Silvani mencionado en un operativo clave: Monte Chingolo. En la navidad de 1975 un comando del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) intentó copar el Batallón de Arsenales 601, ubicado en esa localidad bonaerense. La guerrilla fracasó en su intento y sufrió cerca de cien bajas, contra seis de las fuerzas armadas. En ese momento el ejército no informó de detenidos, por lo que todos habían muerto “en combate”".

Sin embargo, en 1999 el periodista Eduardo Tagliaferro reveló que hubo prisioneros que, tras su detención, fueron fusilados. Pero el nombre de Silvani es investigado en la denominada megacausa, en Tucumán, que analiza más de 200 hechos ocurridos tras el golpe del 24 de marzo de 1976, tal como publicó el diario El Ciudadano.

En la causa judicial a Silvani se le imputan los secuestros y desapariciones de los hermanos Rolando y Ricardo Pisculiche, y de Ramón Araya, todos en la ciudad de Famaillá. Además hay dos declaraciones que lo identifican: la de Eusebio Pisculiche, padre de Rolando y Ricardo, y la de Juan Antonio Araya, hijo de Ramón y militar.