Tras una extensa jornada y luego de varios días de protesta, el ministerio de Trabajo de la Nación, a cargo de Jorge Triaca, recibió a los delegados de la empresa Cresta Roja, que mantenían un corte de la autopista Riccheri hasta que Gendarmería los desalojó con violencia.

A la salida de la reunión en la sede de la Avenida Alem, Triaca dijo que "este gobierno no abandonar a los trabajadores", avisó. Y anunció que "vamos a acompañar en todo momento para que, a partir de lo que diga la jueza, encontremos una salida", señaló el titular de la cartera laboral en una improvisada conferencia de prensa, de la que también participó el delegado Cristian Villalba.

Por estas horas y ante la falta de respuesta política, la Justicia decretó la quiebra de la empresa Rasic Hnos, a la que pertenecen alrededor de 3200 trabajadores. En la práctica, la quiebra debería desmantelar los bienes de la firma avícola, la segunda más grande del mercado en el país.

Triaca se comprometió además a entregar "bolsones" de comida por las fiestas y a incrementar los montos que entrega el Gobierno en componenda por la falta de pagos de salarios.

"El ministerio de Trabajo ha otorgado el programa Repro, de 4 mil pesos y nos comprometidos a dar 6 mil pesos a partir de los primeros días de enero", informó el funcionario, quien agregó: "Vamos a acercar bolsones correspondientes para las fiestas".

A su turno, el delegado Cristian Villalba destacó que finalmente el Gobierno haya comenzado a dialogar con los trabajadores, aunque la apertura llegó luego de la represión hacia la protesta que se mantenía en la autopista Riccheri, en la entrada del aeropuerto de Ezeiza.

"Creíamos que íbamos a tener otra respuesta, pero es medianamente favorable porque empezamos otro camino, que creemos que es el correspondiente", dijo Villalba.

Sobre la posibilidad de que un tercero compre la empresa y resuelva la situación, ambos dijeron que el Gobierno analiza esa alternativa. "Hay interesados que se fueron acercando", destacó Triaca.

"Le pedimos que entiendan que estamos haciendo todo el esfuerzo", dijo el Ministro y reiteró que "este gobierno tiene la predisposición al diálogo".

Villalba indicó que ahora se dirigirá al acampe donde se reunirá con el resto de sus compañeros para definir si se levanta la medida. Aunque en los hechos, la protesta ya no interrumpe la circulación.

Esta mañana, la Gendarmería, que depende de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, retomó la violencia contra los manifestantes y los dispersaron con balas de goma y carros hidrantes. Dejando decenas de heridos entre los trabajadores.

Mientras tanto, el Gobierno prepara un protocolo anti-protesta a sabiendas que el ajuste y la pérdida de empleos desatará resistencia social.