Javier Milei parece estar obsesionado por los mandriles, no porque sea un apasionado por los documentales de Animal Planet sino porque su trasero colorado le da la imagen del acto sexual.

Lo que empezó como un meme de las redes sociales para burlarse de los que no piensan como él no se modificó una vez que llegó a la presidencia, donde sigue utilizándolos.

Ernesto Tenembaum y María O'Donnell pusieron el ojo en este tema y lejos de utilizar eufemismos y figuras alegóricas prefirieron llamar a las cosas por su nombre.