Clarín, Alpargatas, Siderar, Telecom, Petrobras, empresas de distribución de gas, son sólo algunas de todas las empresas de las que el Estado pose acciones, a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES). ¿Por qué se dio esto? Porque durante la privatización menemista de los fondos previsionales, los privados encontraron una gran oportunidad de lucro al venderle acciones a las AFJP, es decir, un negocio a costa de los jubilados. 

Con la reestación de las AFJP, en 2008, esas acciones pasaron a ser parte del erario público, y el año pasado se creó una ley para que sólo pudieran venderse con la aprobación  de dos tercios del Congreso. Pero ahora, Mauricio Macri busca darle una mano a los empresarios, eliminando esa norma, para luego devolverle esos títulos a las manos de los grupos concentrados, a un precio que todavía está por definirse. 

Esa posibilidad se abrirá si se aprueba la ley que el gobierno giró a la cámara de diputados, que modificará el Mercado de Capitales, que fue aprobada durante la gestión de Cristina Kirchner.

El proyecto fue confeccionado por Alfonso Prat-Gay; el titular de la Comisión Nacional de Valores, Marcos Ayerza; el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, y parte de su directorio.

Entre una serie de puntos que son clave para el rumbo político que impulsa el gobierno, se busca modificar la "Ley de Protección de Participaciones Sociales del Estado Nacional", aprobada en septiembre del año pasado. En concreto, se propone eliminar el artículo 20 de esa ley, que es la establece el piso de dos tercios de los votos de diputados y senadores para que se puedan vender las acciones. 

A diferencia de la ley para modificar el impuesto a las Ganancias, la promesa todavía incumplida de Mauricio Macri, estiman que este proyecto que beneficiará a las empresas y que tiene distintos puntos que serán de álgido debate parlamentario, será tratado directamente en las próximas sesiones extraordinarias.