"Si hubiesen hecho las cosas bien, yo los hubiese aplaudido y estaría con Daddy el Chino ganando mucha plata, viajando a Miami con Emilio Disi, actuando, divirtiendo a la gente... Y no lo puedo hacer. Y me metí (en política) para ayudar..."

Con esas palabras, el candidato del PRO Miguel Del Sel intentó explicar su ingreso a la política electoral y, de paso, buscó meter algunas lágrimas de cocodrilo que certificaran su denodado esfuerzo, su enorme sacrificio.

"Mirá, y me emociono", agregó el actor porque, claro, no quedaba muy claro si su trémula voz respondía a un llanto contenido o a un dolor de estómago.

Es que Del Sel no se caracteriza por sus escenas dramáticas sino que está más cerca, mucho más cerca del chiste fácil rayano en la misoginia y la homofobia. Y en este 'acting' se notó.