En una de las columnas del diario Clarín del periodista Marcelo Bonelli, una declaración perdida en el texto delata uno de los objetivos centrales del gobierno de Macri.

Las palabras pronunciadas por el vicejefe de gabinete Mario Quintana se dieron en el marco de una reunión con banqueros y financistas en Manhattan: de acuerdo al relato detallado por Bonelli, la conversación se volvió tensa por la mala situación económica del país, el peligro de no poder cumplir con las metas del FMI, los riesgos políticos de Cambiemos en 2019 y la parcialidad del desenvolvimiento judicial que viene mostrando el juez Claudio Bonadio en la investigación sobre coimas en la obra pública.

“Hay mejoras en el frente fiscal que no se pueden anunciar porque nos perjudicaría en lo político, como por ejemplo la caída del salario real”, celebró Quintana para poner sobre la mesa los 'logros' de los ajustes que lleva a cabo su administración. La 'buena noticia' con la que el funcionario intenta convencer a los financistas no es una mentira: esta semana la consultora Ecolatina publicó un informe donde se observa que los salarios y las prestaciones sociales se reducirían un 8% en lo que resta del año, principalmente por la creciente inflación, en uno de los tristes logros del equipo económico.

Clarín también filtró algunos de los argumentos con los que la delegación que completaron el vice del Banco Central, Gustavo Cañonero, y el secretario de Finanzas, Santiago Bausil, intentaron mitigar las dudas en el escenario electoral.

“¿Qué garantías hay de que Macri será reelecto?", preguntó. Bausili y Cañonero enmudecieron. Otra vez Quintana tuvo que tomar la palabra: “ Los cuatro candidatos mejor posicionados son todos de Cambiemos: Macri, Vidal, Larreta y Carrió. Eso asegura el triunfo”, reprodujo el texto del conductor de TN.

“Debido a los cuadernos de la corrupción, está garantizado que Cristina no puede ganar un balotaje. El hecho de que Cristina puede ser candidata aún presa impide que surja algún otro peronista con posibilidades”, insistieron.

Según manifestó Bonelli, las palabras de Quintana fueron reproducidas por un financista que grabó las conversaciones e incluso hubo 'memos' que circularon en Wall Street al respecto.