En 2019 el ahora diputado libertario Javier Milei, quien sigue siendo diputado a pesar de su bajísima asistencia a la cámara, se disfrazó para ir a un eventó de animé al que no había sido invitado y cuyos organizadores terminaron lamentando su participación.

Pero lo más relevante del caso es que desde el personaje que encara Milei en este evento trata de “vender” la existencia de un país utópico donde reina la libertad y no se pagan impuestos.

Años después Milei pulió un poquito, aunque no mucho, su discurso y logró obtener una banca en la Cámara de Diputados, donde no presentó ningún proyecto, no se opuso a la creación de nuevos impuestos y es difícil verlo ya que es uno de los legisladores con peor asistencia al recinto.