Alberto Fernández hizo una carrera política como operador para unir a las distintas partes del peronismo que se encontraban alejadas por distintas diferencias, y por su capacidad para relacionarse con las fuerzas políticas opositoras.

Así acompañó a Néstor Kirchner como Jefe de Gabinete y continuó su prédica cuando estuvo de la vereda de enfrente al kirchnerismo.

Cuando Cristina lo convocó para que sea el candidato a presidente, lo hizo tomando en cuenta su capacidad de armado, pero nunca imaginó que se iba a cerrar en sí mismo e iba a dejar de dialogar con todos.

Leandro Santoro, quien se reconoció como un amigo personal del Presidente, le confesó a Fantino que ni siquiera él habla con Alberto, en una declaración que nadie hubiera imaginado.