“Existe la posibilidad de que se rompa Cambiemos a nivel nacional, ya que el mismo PRO fue el que decidió romper el bloque dentro de Córdoba”, dijo el diputado nacional Diego Mestre, de la UCR cordobesa y referente de Cambiemos en esa provincia mediterránea.

No fue el primer radical –y no será el último– que manifiesta públicamente la disconformidad del centenario partido para con sus socios macristas puros, quienes de cualquier modo buscan manejar ‘a piacere’ las candidaturas nacionales y provinciales de la alianza.

"No hemos sido escuchados, valorados y respetados dentro de Cambiemos", subrayó el legislador por FM La Patriada, agregando que, sin embargo, "no hay apuro para decidir si nos vamos de Cambiemos".

En 2015, Buenos Aires fue la provincia que mayor volumen de votos le dio a Mauricio Macri para ser presidente, pero el bastión radical de Córdoba fue donde Cambiemos obtuvo la mayor diferencia sobre sus rivales. Y ahora la UCR quiere cobrarse ese pagaré electoral.

Pero Marcos Peña, desde Buenos Aires, quiso que el candidato a la gobernación fuera su ‘pollo’ Mario Negri, un radical PEO, contra las aspiraciones del radical UCR Ramón Mestre, precipitando la ruptura de Cambiemos. Es que Peña no quiso siquiera que ambos dirimieran el asunto en las PASO.

Y la crisis se agudiza cuando los observadores vislumbran una derrota del macrismo en esa provincia luego de que el kirchnerista Pablo Carro desistiera de su postulación a gobernador para potenciar la unidad del peronismo alrededor de Juan Schiaretti.