A poco de asumir como presidente, Mauricio Macri afirmaba al hablar del atentado a la AMIA: “Queremos saber qué ocurrió y, por eso, también elevamos a rango de Secretaría de Estado la Unidad Especial de Investigación de la causa AMIA. Necesitamos verdad y justicia".

Un año y medio más tarde, desde el Ministerio de Justicia de la Nación están ahogando la Unidad Especial de Investigación, retaceándole los fondos necesarios para sistematizar, informatizar y cruzar la información proveniente de varias investigaciones judiciales.

El mismo Gobierno que destinó fondos a la Dirección de Movilidad en Bicicleta de la Dirección Nacional de Transporte No Movilizado de la Subsecretaría de Movilidad Urbana de la Secretaría de Planificación de Transporte del Ministerio de Transporte, le retacea 500.000 dólares a la Unidad Especial para cumplir con su labor, denuncia el periodista Hugo Alconada Mon en La Nación.

En ese sentido, Martín Dinatale hace público en Infobae que el Gobierno evalúa por estas horas cerrar por completo esa dependencia creada en 2000 con la intención de dar celeridad a la causa judicial que investiga el ataque terrorista a la mutual judía.

A cargo del radical Mario Cimadevilla, el trabajo de la Unidad Fiscal "dejó de tener razón de ser", dijo un alto funcionario del Ministerio de Justicia al ya citado portal de noticias. Razón por la cual sólo ha obtenido trabas burocráticas y retaceo de recursos desde la asunción de Macri.

Prometió investigar a fondo porque “queremos saber qué ocurrió” y porque “necesitamos verdad y justicia”, pero lo cierto es que Macri sólo fue un escollo en la investigación que pretende clausurar con el cierre de la Unidad Fiscal.