A la pregunta sobre si se le pagó o no a Vanderbroele la exministra quiso salirse por la tangente y dijo que había un delito previo que fue el descubrir donde y en que condiciones vivía un testigo protegido.

Tan nerviosa se puso la exministra que aseguró que no le competía porque eso no pasaba por el ministerio de Justicia, cuando ella estuvo a cargo de la cartera de Seguridad.

Despues, cuando ya estaba claro que evitaba responder la flamante jefa del PRO sólo repetía que no le constaba y que eso no era lo que le habían dicho a pesar de la prueba irrefutable de la existencia de un recibo por el pago al "arrepentido".

Graciana Peñafort on Twitter