La Fundación Soberanía Sanitaria denunció que la falta de apoyo a proyectos y construcciones hospitalarias realizadas por el gobierno anterior, entre 2003 y 2015, privó de una atención digna a cerca de un millón de personas.  

Hoy "podrían haber atendido 30.700 internaciones, 14.300 partos, 8.730 cirugías y 1.693.000 consultas externas", indicaron desde el organismo en una nota de Página 12

Además, los establecimientos de alta complejidad que están funcionando en forma limitada o directamente cerrados son los hospitales del Bicentenario de Esteban Echeverría, Ituzaingó, Escobar –en la provincia de Buenos Aires–, y de Paraná, Entre Ríos. Lo mismo ocurre con los hospitales Samic (Servicio de Atención Médica Integral para la Comunidad) de Cañuelas, Gregorio de Laferrere y Rafael Castillo.

"El valor total de las obras de los Hospitales de Paraná, Esteban Echeverría e Ituzaingó era de 1.445.702.623,31 de pesos, de los cuales 1.214.384.495,04 de pesos ya habían sido abonados por el gobierno saliente (de Cristina Kirchner), restando abonar a la gestión de Cambiemos, tan solo 231.318.128,27 pesos”, destaca el informe. 

De los 231.318.128,27 pesos que debía abonar la gestión del actual presidente Mauricio Macri, 84.770.215,51 pesos corresponden al Hospital de Paraná, 72.492.572,44 pesos al de Esteban Echeverría y 74.055.340,32 pesos al de Ituzaingó.