Un hombre alcoholizado no quiso pagar su viaje en taxi, y el chofer llamó a la policía. Dos jóvenes que pasaban por el lugar quisieron ver que ocurría y a uno de ellos un policía lo golpeó con dureza.

Esto no es un hecho aislado y se suma a varias denuncias de organismo de derechos humanos que reclaman por el accionar violento de las fuerzas de seguridad de la provincia.