La diputada con una sola declaración terminó con la discusión: "Hay jueces que no actúan como a mi me gustaría que actúen y para eso están los mecanismos institucionales para separarlos".

Basta de gastar recursos en la justicia. Solo hay que preguntarle a Graciela Ocaña cómo le gustaría que falle un juez y su respuesta siempre será la indicada. Y si un juez llega a tener una opinión diferente se lo remueve y listo.

Si no fuera que durante los últimos 4 años la justicia funcionó de esa manera casi se podría tomar como una broma. Pero lo dijo en serio.