Esta vez se encontraron en bandos diferentes. Ya no era el habitual cruce en el que ambos debatían sobre cómo criticar más duramente al Gobierno sino un tema que dividía las aguas.

Luis Novaresio siempre se pronunció a favor del aborto mientras que Viviana Canosa se encontraba en las antípodas, siendo una militante de la llamada "dos vidas".

Pero la licitación de penes de madera para utilizar en la Educación Sexual Integral llevó a un debate difícil de zanjar ante la insistencia de Canosa de no reconocer la importancia de que los alumnos se informen sobre métodos anticonceptivos.