En marzo de 2010, la 'ultra MM' Laura Alonso advertía: "Utilizar los DNU para gobernar implican eludir al Congreso, evitar la deliberación y dar la espalda al pueblo de la Nación y a las provincias que son representadas en ambas Cámaras legislativas".

En ese sentido, planteaba un proyecto de ley que "presentamos para controlar a los DNU y los vetos presidenciales" ya que, decía la diputada del Pro en mayo de aquel año ante los legisladores, "cuando se firma un DNU hay menos democracia".

"Cuando un presidente firma un decreto de necesidad y urgencia –es importante decirlo‑ no sólo está perdiendo poder, a pesar de que cree que lo tiene: está siendo más autoritario. Cuando se firma un DNU hay menos democracia, menos deliberación en esta casa, en este ámbito. Cuando se firma un DNU se sustrae la voz del pueblo representado en esta Cámara y la voz de las provincias y de la Ciudad de Buenos Aires representadas en el Senado", afirmaba Alonso.

Al parecer, 'la D'elía de Macri' –como ella misma gusta definirse– ha cambiado radicalmente de parecer: ahora defiende a rajatabla el decreto por medio del cual el gobierno nombró "en comisión" a dos jueces para la Corte Suprema.

La candidata a ocupar la titularidad de la Oficina Anticorrupción (OA) considera que, con ese decreto, "la Constitución ha sido respetada y el proceso de consultas y selección de candidatos se ha abierto en el Ministerio de Justicia como corresponde".