Durante una entrevista que brindó a Radio del Plata, el diputado santacruceño explicó que "a diferencia del 90 por ciento de la dirigencia, Cristina no tiene jefatura. No tiene jefe ni jefa, tiene los votos de la gente".

En este sentido, sostuvo que en la actual etapa política, la ex primera mandataria "busca compartir su experiencia y seguir estando bien al día en el cara a cara con la gente. Cristina lo dijo, es una militante", al tiempo que adelantó algunos detalles del acto que tendrá como protagonista a la ex primera mandataria el próximo 7 de diciembre en el microestadio de Ferro: "Inicialmente estaba pensado para dirigentes y militantes en el microestadio, pero hay una cuestión que uno no puede manejar que es que la gente va, así que calculo que va a ir un montón de gente que quieren ver a Cristina y compartir" un momento con ella.

Por otra parte, consultado sobre la calificación que el presidente Macri le puso a su propia gestión, Máximo sostuvo irónicamente que al jefe de Estado "le pondría un diez, pero en autoestima".

"A mí no me gusta poner notas, creo que la sociedad debe ser la que evalúe. Para nosotros está claro lo que pensamos: si aumenta la desocupación, se cae la industria, se cae la construcción y se pone un 8, es extraño", apuntó.

Asimismo, respecto del decreto firmado por el Presidente para permitir que los familiares directos de los funcionarios se puedan adherir al blanqueo de dinero y bienes no declarados, confesó que recordó "una frase de Néstor en 2007, cuando dijo que 'Mauricio era Macri'. Creo que este decreto es la prueba cabal de eso y se adapta perfectamente aquella definición".

"Era lógico que esto terminara sucediendo. En el Congreso el oficialismo cedió este punto a sabiendas que este decreto iba a aparecer", añadió, y consideró: "Imagínense si se le hubiera ocurrido al anterior gobierno un decreto de esta naturaleza. Estarían sudando moral y buenas costumbres por cuanto canal de TV hubiera. Como que hay una tendencia a bajar el nivel de exigencia respecto del que hubo con Cristina, lo cual es muy malo para la sociedad porque nos empezamos a conformar con el '¿Y qué querés?'".

Sobre la posibilidad de unidad en el peronismo, Máximo consideró que "así como nosotros estuvimos abiertos a que nos marquen errores o nos pongan una bandera que decía 'Nos duele lo que falta', y eso nunca fue motivo de desunión, algunos compañeros también tienen que reconocer que se pueden equivocar y no siempre estar viendo en el otro al que comete errores".

A lo que agregó que "podemos construir un gran frente nacional y popular con características diversas pero con una heterogeneidad que sea productiva y conducente, si no nos vamos a chocar entre todos".

Por último, también cuestionó a los dirigentes de la oposición "que empezaron el año con la cantinela de que ´había que ayudar´ como si desconocieran cuales eran las consecuencias que tenían esas políticas que les acompañaban en el Congreso".

"Al final de cuentas y al cerrar el año, el acompañamiento que ha habido de diferentes bloques (opositores) al gobierno marca que ha sido equivocado", concluyó.