Sebastián Rosales, el representante argentino ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU, fue clarísimo a la hora de justificar la abstención argentina en la continuidad de una misión que no ha cumplido con sus objetivos ni justificado sus gastos.

“La Argentina ha decidido abstenerse en el presente proyecto de resolución por entender que el diagnóstico realizado por la FFM (Misión Internacional Independiente) no responde a un trabajo producto de investigación en el terreno y al diálogo directo con todos los actores gubernamentales y no gubernamentales involucrados. Si bien coincidimos que es el propio gobierno de Venezuela quien debe permitir el acceso de la FFM al país para investigar adecuadamente las denuncias recibidas, la renovación de la FFM en las actuales condiciones solamente contribuye a continuar un mecanismo que en la práctica y el terreno no pueden mejorar los derechos humanos del pueblo venezolano”.

De hecho la continuidad de la controversial comisión especial fue apoyada por 19 países, rechazada por 5 estados miembros y tuvo 23 abstenciones, es decir que la mayoría de los países miembros prefirieron esta opción.

Pero Macri, que siempre ha denostado la lucha por los Derechos Humanos interpretó a su manera el voto y salió a pedir perdón, lo que no fue muy bien recibido en las redes.

Tweet de Mauricio Macri
Tweet de matias
Tweet de Diego Ibarra
Tweet de CharlyT
Tweet de Leo Sierra
Tweet de DarkPolitiK
Tweet de LUVELR🔆
Tweet de Fabián Vallejo
Tweet de Luciani llorando🇦🇷🚀💵