Desde que el fin de semana se desatara el escándalo por las figuras que formaron o participaron de sociedades offshore, Mauricio Macri emitió un comunicado impersonal de Presidencia y habló de una "operación legal" de su padre, Franco.

Por el momento, sólo dos mujeres salieron a tratar de explicar el desaguisado de la familia Macri:  la encargada de la Oficina de Anticorrupción, Laura Alonso, y ahora la vicepresidente Gabriela Michetti.

Ninguna de las dos pudo ser muy convincente a la hora de hallar explicaciones coherentes para que un empresario y político formase una sociedad offshore, un tipo de firmas especialmente diseñada para evadir impuestos y lavar dinero.

Por ejemplo, Michetti balbuceó lo que, supuestamente, el propio Macri le explicó sobre el origen de la sociedad en Panamá: "Se hizo por las dudas..."