Verónica Heredia, la abogada de la familia de Santiago Maldonado, cruzó a la ministra Patricia Bullrich al señalar que desde "el 4 de agosto" el comandante Fabián Méndez, quien estaba a cargo del Batallón 35 de Gendarmería que llevó adelante el operativo el 1 de agosto en la comunidad mapuche Pu Lof de Cushamen, aportó en la audiencia de hábeas corpus el nombre de siete gendarmes "que estuvieron en ese momento", en referencia al que fue visto por última vez el joven desaparecido. 

Bullrich se refirió a ellos anoche como "los que estuvieron más cerca del río". La abogada de Maldonado señaló que, en caso de coincidir con los mencionados por Méndez, "no es información nueva" sino que consta en el expediente, a partir del testimonio del comandante principal del Escuadrón 35 de El Bolsón, "desde el 4 de agosto", tres días después de la desaparición de Maldonado. 

En declaraciones formuladas esta mañana a Radio Con Vos, la abogada de la familia de Maldonado dijo desconocer la documentación que funcionarios del Ministerio de Seguridad le entregaron el lunes al juez federal Guido Otranto, en Esquel, pero señaló que "lo cierto es que desde el primer momento, en la audiencia de hábeas corpus del 4 de agosto en el que se presentó el comandante Méndez, quien estaba a cargo del operativo según la orden del 31 de julio, ese mismo día aportó, reticentemente, el nombre de siete personas que estuvieron en ese momento". 

En ese marco, Heredia cuestionó el secreto de sumario que el magistrado impuso sobre el expediente durante veinte días por considerar que "no hubo ningún fundamento para mantener veinte días el secreto sumario porque no se ha realizado ninguna medida extraordinaria como para justificarlo". 

"Lo único que hizo fue alejar a la familia de la posibilidad de trabajar sobre las pruebas, de conocer el expediente y mantenerlos en una incógnita de qué estaba haciendo el Ministerio Público Fiscal", planteó Heredia. 

Además, la letrada volvió a reclamar por el registro fotográfico y las filmaciones que la Gendarmería realizó el día del operativo: "No tenemos el relevo de este cotejo de todas las cámaras secuestradas y de las computadoras donde supuestamente se bajaron el crudo de las fotografías y filmaciones. Con eso todavía no contamos por lo menos nosotros, la familia". 

En ese marco, indicó que, "a simple vista, faltaban momentos del ingreso al Pu Lof, la secuencia de las fotografías justamente de cuando llegan a la vera del río", lo cual -señaló la abogada- "es un dato muy sospechoso". 

El paradero del joven se desconoce desde el pasado 1 de agosto cuando, según testigos, fue visto por última vez en la comunidad mapuche Pu Lof de Cushamen, en el noroeste de Chubut, durante un procedimiento llevado a cabo por la Gendarmería tras el desalojo de una protesta en la ruta nacional 40 por orden del juez Otranto. 

Actualmente, en el juzgado de ese magistrado tramitan dos causas: una de ellas, correspondientes a los pedidos de hábeas corpus, mientras que la otra investiga la presunta "desaparición forzada" del joven en el marco del operativo de Gendarmería.