El breve ministro de Economía de De la Rua que tuvo que renunciar por la presión de Franja Morada parece tener los contactos con la embajada de Estados Unidos aún más aceitados de la propia Patricia Bullrich y explicó por qué ahora no hay que pedir la detención de Maduro.

La ex ministra de Seguridad del macrismo había asegurado que tendrían que detener a Maduro en el caso de que viniera al país, sin ningún tipo de sustento jurídico. 

Al ridículo pedido de Bullrich ahora se suma Ricardo López Murphy quien intentó explicar por qué no hay que considerar un enemigo a Maduro ya que después de la guerra entre Rusia y Ucrania el presidente de Venezuela dejó de ser considerado como un dictador por el gran país del Norte y si bien no es considerado un aliado ya dejó de ser el enemigo.

Lo más grave es que el diputado no se niega a la detención por considerar que Nicolás Maduro es un presidente constitucional sino que simplemente cumple con las órdenes de sus jefes.

Tweet de Sebastian Fernandez