No importa que hasta Alfredo Casero les haya hecho sentir que su juego estaba desgastado y no le servía ni a la propia derecha, en LN+ siguen con su cantinela incesante contra el populismo y sus derivados regionales.

Pero esta vez llegaron a un límite impensado al revivir el histórico desprecio de las clases altas hacia Eva Perón, un odio que parecía haber quedado en el olvido después de más de setenta años.

Pero para eso había que traer a alguien que haya estado vivo en esa época y Ronald Scott, a sus 104 años, mostró que los años no solo no aplacan a la gente sino que les hace ser más intolerantes que nunca.