"En Argentina hay cinco empresas de producción de alimentos que tienen el 90 por ciento de las marcas de alimentos, que son los que después le pagan la campaña a Juntos por el Cambio. El proyecto es para sancionar una ley que buscar regular el acceso público a la información para que nuestra población pueda alimentarse saludablemente y eso es lo que no quieren discutir", señaló Leonardo Grosso en declaraciones a Radio Nacional.

El oficialismo de Diputados buscaba reunir quórum para la sesión especial para intentar convertir en ley el proyecto de etiquetado frontal, que propone se fije una inscripción en los envases de los alimentos en la que se advierte sobre los excesos de grasas, sodio y azúcar que contienen los productos.

Ante la negativa del bloque de JxC de garantizar el número de presentes, Grosso afirmó que desde el FdT están "trabajando con todos las bancadas provinciales" para obtener el quórum, y confirmó que el oficialismo "ya reunió 119 diputados y necesita alcanzar diez más" para alcanzarlo y así permitir que la sesión se inicie.

A su vez "pidió racionalidad" a JxC "para que se sienten a debatir" e insistió con que "no están de acuerdo con el proyecto porque establece regulaciones que protegen la salud de la población frente a la ambición de las grandes empresas productoras de alimentos de la Argentina".

"No pueden votar esta ley porque las grandes empresas alimentarias están haciendo un lobby feroz, y si de lobby se trata, son los primeros en levantar la mano para hacerse eco", observó sobre la postura del macrismo.

Acto seguido, Grosso explicó que "el proyecto de etiquetado frontal de alimentos pierde estado parlamentario en solo tres meses" y será "muy difícil tener funcionamiento parlamentario en el medio de procesos electorales", por lo que "entendemos que este es un momento importante para avanzar con la ley que ya tiene media sanción en la Cámara de Senadores".

A su vez, señaló que Argentina "tiene problemas de salud graves vinculados a cuestiones evitables, como el consumo y la alimentación de nuestra población", y resaltó que hubo un aumento de la diabetes y de la obesidad en los últimos años.

En este sentido, agregó que "está comprobado científicamente que solo el 13 por ciento de la población entiende o le presta atención al dorso del producto donde dice lo que contiene", siendo que "es información que debería estar en el frente con una etiqueta visible para decidir si se quiere consumir mucha azúcar o no".

"En definitiva es tener un acceso informado a lo que consumimos", puntualizó.