El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunió este miércoles durante casi dos horas con organismos de derechos humanos, a los que les comunicó que ratificó en su cargo al secretario de Cultura de la Ciudad, Darío Lopérfido.

Esta decisión ocurre luego que el funcionario porteño brindara una charla abierta en Pinamar, donde afirmó, en medio de aplausos, que "los desaparecidos no fueron 30 mil" y disparó que esa cifra "se arregló en una mesa cerrada" para "conseguir subsidios".

Por supuesto, la noticia fue muy mal recibida por Abuelas de Plaza de Mayo, cuya titular, Estela de Carlotto, expresó su rechazo a la determinación del jefe comunal, cuando las organizaciones ya habían declarado a Lopérfido como “persona no grata” y habían solicitado su renuncia.

“No se le va a pedir la renuncia a Lopérfido porque se comunicó con Almeida y con Mabel Careaga, (hija de una de las primeras Madres de Plaza de Mayo desaparecidas), y les pidió disculpas en una nota manuscrita en la que a la vez repudia la dictadura”, dijeron desde la Jefatura porteña.

“La respuesta es una cachetada a los organismos de Derechos Humanos, a nuestros 30.000 hijos, y a toda la sociedad", expresó indignada Taty Almeida, de acuerdo con el sitio Infonews, y añadió: "Siguen respaldando a Lopérfido, pero vamos a seguir insistiendo”.

En el mismo sentido, Mabel Careaga, manifestó: “Queremos que Lopérfido se retire del Consejo Ejecutivo del Parque de la Memoria; para Rodríguez Larreta, las eventuales disculpas de las cartas que mandó, que no fueron públicas, son suficientes”.

De la reunión entre los organismos y el jefe de Gobierno, que se realizó en la Jefatura, participaron Carlotto (Abuelas), Almeida (Madres Línea Fundadora) y el director teatral Alfredo Arias; todos en representación de las más de 8 mil firmas que exigen la renuncia de Lopérfido.