El proyecto de reforma del Código Penal que impulsa el oficialismo logró el primer paso para convertirse en Ley.

La iniciativa fue modificada en cuarenta puntos durante el debate que se llevó adelante comisiones, producto de propuestas de lois distintos espacios políticos de la Cámara alta.

Una de ella modificó que si los extranjeros que delincan, si residen en el país de manera legal podrán solicitar una "probation" para no ser extraditados.

La reforma busca un cambiar la concepción de la normativa de un sistema judicial "inquisitivo" a uno "acusatorio" en el que los fiscales tendrán la responsabilidad de la investigación en las distintas causas, mientras que los jueces se reservarán para resolver y sentenciar.

Otro de los puntos que se eliminó luego de ser discutido con la oposición fue el del término "conmoción social" como posible disparador de un dictamiento de prisión preventiva hacia un acusado.

Por otro lado, el rol de la Defensoría General de la Nación y la Procuración General de la Nación se encuadrará en la distribución de las causas activas entre las Fiscalías y Defensorías ante cada Cámara "mediante un sorteo que garantice la distribución equitativa".