Los efectivos de la policía no hacen nada si no reciben la orden de hacerlo por lo que se especula que la idea era dejar un arma tirada en la plaza para justificar la represión asegurando que los manifestantes estaban armados.

Pero como parece que ni eso saben hacer bien, las cámaras de C5N mostraron el momento exacto en el que un efectivo, que encima puede ser identificado fácilmente porque no tenía puesto el casco, arroja el arma el piso y la patea para alejarla un poco.

Cuando el móvil se acerca se puede ver con claridad el arma tirada en el piso y Jorge Rial advirtiéndole al movilero que no la toque. De todos modos el documento fílmico de este delito en manos de las fuerzas de seguridad deja a las claras los métodos del Gobierno.

Esta vez les salió mal por la presencia de la prensa.