Dady Brieva no es un hombre de callarse lo que piensa y eso le pudo haber traído algunos problemas pero dejó en claro que el papel del actor es justamente ser disruptivo y que si eso le cuesta dejar de vender algunas entradas no le preocupa demasiado.

Obviamente el actor dejó en claro que tampoco es Camilo Cienfuegos y que él no va a los programas a hablar de política sino a hablar de su trabajo pero que si le preguntan, no va a dejar de decir lo que piensa.