La respuesta es afirmativa. La palabra puede ser un cierto tipo de violencia psicológica. El periodista Luis Majul hizo uso de la palabra, como de costumbre, para atacar a exfuncionarios del gobierno de Néstor y Cristina. En este caso el turno fue de Carlos Zannini.

El conductor de La Cornisa, se refirió a Zannini como "el peor de todos los funcionarios del gobierno kirchnerista", como "el mayor enemigo del periodismo", como "una persona mala, despreciable y cruel", pero para él está dentro de los marcos "legales" del periodismo.

Después de varios tuits negativos hacia el que hubiera sido el vicepresidente de Scioli, reveló su discrepancia con los violentos ataques que tuvo que sufrir arriba de un avión y en la cancha de Boca. ¿Hipocrecía?