Guillermo Moreno siempre da espectáculo. Por eso es habitué en los programas de Crónica donde suele debatir -y generalmente ganar- ante los que lo interpelan con frases hechas y sin datos.

A su favor suele tener el conocimiento de las cuentas públicas del país, lo que lo hace un contrincante complicado en la dialéctica verbal.

Esta vez defendió con uñas y dientes el gobierno de Gildo Insfrán en Formosa del cual aseguró que es "un templo peronista".