Organizada por la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (FIPCA) y otras organizaciones sociales, el sábado llegó a Lago Escondido, ubicado en la provincia de Río Negro, la cuarta edición de la Marcha por la Soberanía.

El objetivo de la marcha fue concientizar a la población sobre la apropiación que el magnate Joe Lewis hace de ese espejo de agua, habiéndolo virtualmente cercado para impedir cualquier acceso de la población local y de turistas.

No solo los participantes de la Marcha no pudieron acceder al lago gracias a que las tranqueras estaban bloqueadas por la policía provincial, sino que dos kayaks utilizados en el lago por activistas fueron volcados por una lancha de la seguridad privada de Lewis.

Los ocupantes de las pequeñas embarcaciones fueron hostilizados, luego volcados y cuando cayeron al agua se los llevó a la orilla y fueron entregados a efectivos de la policía rionegrina que había convocado el magnate amigo de Mauricio Macri.

David Nahuel Ramallo, integrante de Radio Gráfica y militante de FIPCA, y Andrea Gatabria, de ATE Capital, eran quienes tripulaban los kayaks y formalizaron la denuncia tras el grave incidente.