“1, 2, ultraviolento” cantaban Los Violadores al salir de la Dictadura para reflejar el estado de situación en que había dejado a la sociedad la pesadilla que se acababa de terminar.

Ese mismo grito es el que proclama José Luis Espert en una retorcida vuelta de tuerca de la historia para meternos nuevamente en una espiral de violencia.

Con un tono agresivo y apuntado a un núcleo duro que quiere resolver los problemas sociales con represión, el candidato libertario sesga cada vez más su discurso, que hasta escandaliza a los conductores del derechista LN+.