La irrupción de Esmeralda Mitre fue tomada en un principio como una performance pintoresca de una actriz al borde del exceso, pero cuando fue con seriedad por su herencia y el control del multimedio La Nación las caras de algunos políticos y empresarios, cambiaron.

Ahora que ganó el juicio su perfil fue opacado en los medios hegemónicos y ya no se la ve con tanta frecuencia, según ella, por una decisión de los dueños de éstos.

Pero ahora fue aun más allá y denunció que sufrió un sospechoso accidente y no dudó en acusar a "un ex presidente" de estar atrás del mismo.