La miserable estrategia del sector más duro de Juntos por el Cambio pasa por agitar un clima destituyente en medio de una pandemia que azota la salud y la economía de todo el mundo.

En ese estado de reverberación en el cual todo aquel que no se suma a manifestarse contra el Gobierno para forzar su salida cayó la principal central empresarial, la Unión Industrial Argentina a la cual Patricia Bullrich criticó con dureza.

Ya sea porque quiere obligarlos a ir duramente contra el presidente Alberto Fernández o porque sabe que las relaciones quedaron dañadas después de la opereta de los cuadernos que los extorsionó, el vínculo esta dañado.