Con fuertes críticas por cómo se dio la designación y por la falta de debate en relación al cupo femenino, el Senado aprobó este miércoles los pliegos que designan a los dos nuevos jueces para la Corte Suprema de Justicia, y completan las vacantes: Horacio Rosatti -exdecano de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de Santa Fe y exintendente de esa ciudad- alcanzó 60 votos afirmativos y 10 negativos, mientras Carlos Rosenkrantz -doctor en Ciencias del Derecho de la Universidad de Yale- contó con 58 votos a favor y 12 en contra.

Las opiniones en contra se hicieron escuchar y evidenciaron que las posiciones dentro del bloque del PJ-FpV, un sector se alineó con los gobernadores de sus provincias, lo que produjo la -hasta hace pocos días- improbable victoria del oficialismo.

Las denuncias de inconstitucionalidad que se escucharon por parte de los senadores que votaron en contra, tuvieron como eje principal la designación mediante un DNU del Ejecutivo, lo que significa que los elegidos hayan aceptado un nombramiento en esas circunstancias y la necesidad de avanzar con la equidad de género en la Corte: ahora el Tribunal Supremo quedará constituido con cuatro hombres y una sola mujer.

Cambiemos necesitaba los dos tercios de los presentes para avalar las designaciones presentadas por Mauricio Macri en un autoritario DNU, para saltearse los procedimientos reglamentariamente previstos.

El salteño Rodolfo Urtubey expresó que “el error inicial del gobierno de Macri, fue enmendado enviando los pliegos al Senado”, en la misma línea que el radical Alfredo Martínez describió el debate de los pliegos como“muy interesantes”.

En oposición a los pliegos, la santacruceña María Ester Labado apuntó la “violación clara a nuestra Constitución” y apuntó contra los candidatos: “Desde el minuto que aceptan la designación por decreto no son dignos de mi acompañamiento para la Corte”, pronunció en declaraciones reproducidas por parlamentario.com.

“Esto no es un acuerdo del Senado, el hecho ya fue consumado en el decreto”, agregó la senadora, quien por otra parte subrayó que los reclamos de equidad de género eran un “mero discurso” porque el Gobierno “tuvo tiempo para haber mandado una candidata mujer”.

Nancy González manifestó la contrariedad que se plantea con estas designaciones: “No estamos respetando la diversidad de género. Queremos colaborar con el Gobierno pero el Gobierno quiere imponer cosas que no son legales. Lo que estamos votando hoy es ilegal”, añadió.

La santacruceña Virginia García mostró la desconfianza que le sugieren los nombrados: “Si aceptaron ser designados en comisión, cuando la Constitución no se lo permite, qué esperar de ellos. Hay sectores del partido que parece que no tienen claro que perdimos y hoy somos oposición", cargó contra sus compañeros de espacio político.
 

Antecedentes de los nuevos magistrados

Rosatti es abogado, escribano y doctor en Ciencias Jurídicas por la Universidad Nacional del Litoral y máster en evaluación de impacto y gestión ambiental por la Universidad Nacional de Santa Fe, además de ser docente de grado y posgrado. Fue convencional constituyente por Santa Fe en la reforma de la Constitución Nacional, Intendente de la ciudad de Santa Fe, Procurador General del Tesoro, Ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y conjuez de la Corte.

Rosenkrantz es abogado de la UBA, magíster en Derecho y doctor en Ciencias del Derecho de la Universidad de Yale. Es rector de la Universidad de San Andrés, becario de la Comisión Fullbright y miembro del claustro de la Yale Law School. Además, fue asesor del Banco Mundial, del Consejo para la Constitución de la Democracia y de la Honorable Convención Constituyente.