Si uno toma distancia entiende que puede haber razones puramente electoralistas, para el corto plazo, y casi una reacción instintiva ante la amenaza de la ultraderecha de seguir comiéndoles votos.

Pero aun desde esa posición parece poco aconsejable ir contra una ley bastante transversal, poco ideológica y que tiene apoyo mayoritario, es el famoso 'tiro en el pie' que suelen darse a ambos lados de la grieta cuando se miran demasiado para adentro.

En ese contexto, y ante la decisión de Juntos de no dar quorum, Fernando Iglesias hizo una de las suyas en el recinto, al entrar con todo el histrionismo del que es capaz, revoleando un cartel y gritando para que las cámaras se vayan con él, como hicimos nosotros, porque el truco es viejo pero todavía resulta.