La consigna era atractiva por lo peligrosa que podía ser según el talante de la conversación. Porque pedirle a un político que muestre el chat que mantiene con un adversario de una elección interna es arriesgado.

Pero Horacio Rodríguez Larreta tuvo una salida muy particular, que no solo le pidieron que mostrara en cámara, sino también dar el ejemplo con su compañero Diego Santilli.