La única explicación posible para que Javier Milei hubiera votado en contra de esta ley es que no haya entendido su verdadero espíritu y su importancia.

A pesar de que el operador macrista Diego Sehinkman intentó explicársela una vez más el libertario se encerró en su discurso y consideró que la existencia de estudios para detección temprana de caridiopatías es una intervención del Estado y además implicaba más gasto.

Ante la insistencia de Sehinkman Milei se limitó a contestar que votó “en función del ideario liberal”.

Impresentable el diputado.