Ahora que las vacunas están llegando y se distribuyen en la población, las voces de aquellos que se opusieron, inventaron temores infundados o sostuvieron dislates como que traía consigo un chip, no cumplía los protocolos o era mejor combatir la pandemia con otros métodos, se llamaron a silencio.

Pero no todo pasa. Un hombre se quebró al recibir la vacuna en Ezeiza y le agradeció al intendente y al presidente por "haber pensado en los pobres".