La nueva gestión de Aerolíneas Argentinas, a cargo de Isela Costantini, ya aplicó un fuerte recorte de rutas y frecuencias, con un perjuicio directo en el llamado Corredor Petrolero que incluye las ciudades de Río Gallegos, Comodoro Rivadavia, Neuquén, Mendoza y Córdoba.

 El argumento de la Nación para aplicar un ajuste en la empresa radica en la supuesta búsqueda de eficiencia. Sin embargo, el Corredor Patagónico era rentable, según información del balance de Aerolíneas, durante todo 2015 estas rutas directas le dejaron a la empresa cuatro millones de dólares.

Tal como sucedía antes de su implementación en el año 2008, a partir de ahora cualquier usuario que quiera viajar, por ejemplo, desde Comodoro Rivadavia a Rio Gallegos, nuevamente deberá pasar por Buenos Aires, con un viaje estimado en doce horas (dos vuelos con escala).

La eliminación de los vuelos directos entre Río Gallegos y Comodoro Rivadavia es total. De 14 vuelos semanales, la nueva gestión de la aerolínea canceló todas las frecuencias. Para el caso de Neuquén y Comodoro, que en 2014 habían registrado 28 vuelos semanales, según la información consolidada para el período 2008-2014,  el recorte es de 50,0 por ciento (14 vuelos semanales).

Para la ruta Córdoba-Mendoza, el recorte va de 28 vuelos semanales a 14. Y en el caso de Mendoza – Neuquén, también se cortan la mitad de las rutas (7 semanales).

Para octubre del año pasado, todas las rutas del corredor habían arrojado un resultado operativo positivo en 340.000 dólares. Para ese mes, todas las rutas transportaron 12.862 pasajeros, que anualizado dio un total de 154.300 usuarios. La ocupación total de los vuelos alcanzó un 83,71 por ciento y le dejó a la empresa una ganancia de 4 millones de dólares.